Redes sociales

Sígueme en YouTube Sígueme en Wattpad Sígueme en Instagram Sígueme en Tiktok Sígueme en Tiktok

Barbie, ¿una muñeca controversial?



Desde hace tiempo he escuchado críticas contra Barbie que han llamado mi atención y tendría que hacer especial referencia a aquel comentario de que la muñeca impone a las mujeres un canon de belleza establecido, lo que daría lugar a una conversación más larga.

Lo que me parece curioso es que no conozco el primer caso de niñas que hayan dicho, «hey, quiero ser igual de delgada, rubia y ojizarca que Barbie». En cambio, sí he escuchado citas como, «quiero ser como Barbie», haciendo referencia a lo que es como persona y no en apariencia.

En el mundo se conocen pocos casos de mujeres que han querido parecerse a Barbie, literalmente, para lo cual gastan millones de billetes en operaciones y dietas estrictas, además de modestas etiquetas de comportamiento. Pero son personas obsesivas con su apariencia y esto no se circunscribe a Barbie. Cuántas veces no hemos escuchamos por la televisión o por internet que 'X' persona cambió su rostro por verse más como Angelina Jolie, Kim Kardashian o Britney Spears y hasta podríamos afirmar que estas mujeres quieren imponer un canon de belleza a las otras, pero entonces alguien saldría en su defensa y diría que son libres de hacer con su cuerpo lo que les plazca; y no quiero entrar a discutir sobre quién tiene la razón.


A lo que quiero llegar es simple, Barbie es una muñeca que fue creada para ser un juguete para niñas, al igual que Mickey Mouse fue creado para ser una caricatura. Su prosopografía, su etopeya y en general sus rasgos característicos son propios de un personaje, que pudo ser de cualquier manera, pero por alguna razón su creadora la eligió así y eso puede tener algo que ver con los estereotipos de la época o no.

Ahora bien, ¿qué importancia tiene esto? Al parecer mucha, porque la gente prefiere centrarse en el aspecto "adecuado" que en la personalidad de la muñeca. No he escucha al primero que diga, «¿por qué Max Steel tiene un bronceado tan perfecto y es tan musculoso?, Oh, eso es porque es un estereotipo de hombre perfecto». Pero de Barbie sí y es porque tendemos a creer que la belleza o simplemente lo físico es influyente en una heroína.

Los que critican a Barbie lo hacen por su aspecto, pero sé que en los últimos años la marca se ha preocupado por ser más integrativa en lo que se refiere a tipos de cuerpos, creencias y colores, es decir, se esfuerza por complacer a sus clientes en vez de imponerles sus gustos.


En tiempos de antaño, cuando Disney no había cambiado su idea sobre princesas y heroínas, existía Barbie para hacerle creer a todas las niñas, incluyéndome, que teníamos la posibilidad de ser lo que quisiéramos ser. Y no pensábamos en ser modelos de revistas ultrasexistas, pensábamos en ser aventureras, guerreras, hechiceras, mujeres independientes, capaces de conquistar al mundo y no por su físico, sino por su inteligencia y amabilidad.

Las películas de Barbie no solo captaban la atención de chicas, sino de muchos hombres también. Admítanlo chicos, veían Barbie en la televisión y no por acompañar a sus hermanas, sino porque sus películas eran buenas.

En mi época nunca soñé con ser Cenicienta, Blanca Nieves o la Bella Durmiente, tampoco soñaba con convertirme en Barbie, sino en ser como ella y perseguir mis sueños.

Barbie era la única mujer libre de entonces, alguien que no se avergonzaba del color rosa y que no creía que la amabilidad fuese un signo de debilidad femenina. Se veía orgullosa de ser quien era e inspiraba a otras jóvenes a seguir su ejemplo.

A excepción de Mulan, las princesas Disney no me hacían sentir especial. La idea de una chica bonita cuya máxima aventura era ser conquistada por un chico me aburría, tanto así que mejor me imaginaba como Tarzán, aunque fuera hombre. Con Barbie no tenía esos problemas, porque, aunque Ken estuviese en la historia, ésta siempre se centraba en Barbie. Ella no solo se dejaba conquistar, conquistaba siendo ella misma, no era ninguna carga, ningún objeto de admiración, ella en verdad hacía equipo con su pareja y juntos intentaban solucionar sus problemas, tanto así que uno no recuerda el romance, sino la aventura.

Ken siempre supo lidiar con Barbie y nunca la degradó por ser mujer, pero Ken tampoco era menospreciado por Barbie, aunque no fuese su héroe.

Sin embargo, en las últimas películas que ha sacado la marca vemos a un ken desmejorado, que se ha convertido en un chico superficial, materialista y hasta algo soso; todo esto con el fin de darle más protagonismo a Barbie, como si ella se fuese a opacar por la presencia de un chico con personalidad más marcada.

Mattel subestima el poder de su muñeca. Ella no necesita un niño mimado como compañero para que nos centremos en ella, pues es capaz de hacerle frente a cualquier protagonista masculino por más rudo que este sea. Los hombres merecen ser tomados en cuenta en las series o películas dirigidas a niñas, merecen tener complicadas e interesantes personalidades y mayores desarrollos en la trama.

La integración femenina no es sinónimo de menosprecio masculino, los hombres tienen derecho a ser lo que ellos quieran ser, al igual que Barbie.

Debo admitir que, en algún tiempo, en el clímax de las críticas a Mattel, me daba vergüenza admitir que veía a Barbie y que quería ser lo que yo quisiera ser al igual que Barbie, pero siento que hemos llegado a una época en la que se valen todo tipo de gustos y me siento capaz de hablar de lo que me gusta sin sentirme avergonzada.

Tengo mucho que agradecerle a Barbie, principalmente por ser mi heroína cuando no tenía un mejor ejemplo de chica en la televisión y lo siento por las bratz, demasiado cabezonas y delgadas más para mi gusto, sin contar sus personalidades, un tanto superficiales y un tanto estereotipadas, y lo siento también por otras muñecas que habrán llegado después y que no habrán llamado mi atención.

Y aunque siento que Mattel se ha desviado un poco del tema, centrándose más en complacer al público que en fortalecer la personalidad de su creación, creo que Barbie sigue y seguirá inspirando a muchas niñas y niños a ser valientes y a creer en sus sueños.

Dotatodi.





Entradas que pueden interesarte

Sin comentarios